El frade verde conocido en inglés como “green fraud”, se ha visto impulsado en los últimos años debido a la existencia de nuevas modalidades de fraude surgidas por la creciente preocupación de los países enfocados en aplicar las estrategias net zero para el logro de cero emisiones netas y la descarbonización de sus economías para antes del 2050.
¿En qué consiste el fraude verde?
También es llamado “fraude ecológico” ya que es originado por empresas fantasma, robo de identidades a personas y apertura de cuentas bancarias para recibir fondos malversados; todo esto, con el fin de obtener apoyos disponibles para atender asuntos ecológicos que resultan preocupantes a nivel global.
Sin embargo, su uso final por parte de estas empresas fraudalentas es completamente distinto al ya descrito.
Los principales escenarios para la atracción de inversionistas, clientes y financiamientos por parte del gobierno que terminan ocasionando el fraude verde son:
- Obtención de subvenciones utilizadas para fines ilegítimos
- Duplicación de solicitudes para recibir fondos de este tipo.
- Creación de credenciales ESG fraudulentas. (Credenciales Medioambientales, Sociales y de Gobernanza)
- Ciber fraudes con robo de datos personales y suplantación de la identidad de usuarios digitales.
Consecuencias.
Los países han perdido fondos públicos a gran escala debido a la falta de mecanismos de control en la implementación de planes que conlleven una inversión importante a proyectos ecológicos empresariales; poniendo en riesgo inherente a los sectores públicos y privados que intentan adoptar medidas medioambientales, pero requieren fuertes apoyos económicos.
Debido a que, el objetivo de cero emisiones significa para cada país tener que reorientar todos los procesos productivos de las empresas hacia actividades que preserven sus recursos naturales y dejen de contribuir a la contaminación ambiental.
Mientras que, por parte de la población, se requiere cambiar paulatinamente los hábitos de vida y consumo por maneras más ecológicas.
Estrategias preventivas.
La colaboración entre el sector publico privado ayudara a evitar el lavado de dinero y la financiación al terrorismo. No obstante, organismos gubernamentales, despachos jurídicos, consultoras, bancos y demás compañías deberán compartir recursos, habilidades y conocimientos para contrarrestar la fuerte amenaza del fraude verde a nivel mundial.
Aunado a esto, algunos puntos de acción eficaces para proteger las inversiones verdes, controlar el fraude ecológico y dejar de desperdiciar recursos, son:
- Creación de un marco preventivo con políticas, protocolos y mecanismos de Due Diligence.
- Completo análisis de los datos obtenidos a través de un reporte y monitorización desarrollado con inteligencia artificial.
- Implementación de mecanismos de recuperación ante fraudes para crear una solida red de seguridad para recuperar los fondos.